La niña que fui
La Niña que fui
se esconde en mi bolsillo
y saca las orejas
cuando oye que brillo
La Niña que fui
sube por los botones
y me llena de besos
cargados de emociones
La Niña que fui
se sienta en mis orejas
y me canta cositas
de cuando era chiquita
A veces no la sé encontrar,
tan adentro se esconde
que me pongo a llorar
preguntándome dónde
No te vayas niña que fui,
necesito tus ojos
tu risa y tu flor
para ver las cosas
de otro color.